De la metafísica al entorno virtual - La producción intelectual

La producción intelectual, a lo largo de los años ha respondido a “las condiciones estructurantes surgidas en cada sociedad”. Ya sean cambios generados por fenómenos sociales o naturales como el actual COVID, la producción de conocimiento sigue un método y enfoque, que si bien no se puede llamar “exclusivo,” han redefinido sus propias técnicas e instrumentos de recolección y medición en el estudio de cada fenómeno.

Hoy nos enfrentamos ciertamente a uno de los mayores cambios de la historia en los últimos 80 años. Tal vez uno de los más trascendentes de la humanidad con grandes cambios no solo en el campo de la salud, sino también en cada aspecto del entorno social; y uno de los mayores desafíos que enfrentamos como investigadores y productores de conocimiento, es el de contribuir en el desarrollo de herramientas y conocimientos que permitan a instituciones y empresas, comprender los diferentes factores y condiciones estructurantes de esta nueva revolución socio-tecnológica.

Históricamente la producción de conocimiento ha sido asociada a instituciones públicas o privadas de carácter educativo como si fueran los únicos espacios en los cuales puede darse la producción intelectual. Se ha creado un estigma socio-científico al respecto de ello, no es de extrañarse que al hablar de conocimiento y educación, se asocie esos dos sustantivos a una estructura material, una edificación arquitectónica como la escuela o la universidad en su forma física, pues no hay nada de malo en ello ya que el ser humano siempre ha tratado de asociar sus creencias en elementos físicos.

Y me pongo a pensar, qué me respondería un niño del cual este fue su primer año de escuela, al preguntarle: “que es lo primero que se te viene a la mente al escuchar la palabra escuela”. Para la mayoría de los estudiantes de nuestro país, sin duda la educación a distancia ha sido algo nuevo, con buenas y malas experiencias.

El mayor cambio que se ha dado por la medida de las cuarentenas y los aislamientos sociales, a nivel estructural, es con la educación. El conocimiento más que en cualquier otra época se ha vuelto en el mejor negocio, pero debido a que el cambio ha sido tan abrupto en un periodo tan corto, sobre todo en sociedades en las que la adaptación tecnológica ha sido lenta por diferentes circunstancias socioeconómicas y políticas, el conocimiento ha llegado a volverse en especulación.

El uso inapropiado de las herramientas tecnológicas ha hecho que el conocimiento y la información que predominan en las redes hayan adquirido una connotación especulativa. No por la veracidad de los sucesos o fenómenos, sino por lo rápido que la información se actualiza en estos medios, por la gran diversificación de interpretaciones, opiniones y pensamientos.

Es por esa razón que analizar, reflexionar, interpretar y generar conocimientos que aporten a mejorar la educación, la producción intelectual, a partir de las experiencias de los actores, es fundamental para desarrollar estrategias de solución a los nuevos desafíos y necesidades de la población, como en la educación.